“Levántate
Amado”
Sus
Besos Sedientos No Volvieron Al Amado,
Sus
Manos Despavoridas Tocaban Sin Hallar,
Su
Grito Cual Horrendo, Su Ser Desesperado,
¿Respuesta?
Macabro Eco De La Fatalidad.
Yacía
Su Cuerpo, Pesado, Inerte,
Aquel
Que Otras Veces Con Trabajo Despertó,
Yacía
Magullado, En Brazos De La Muerte,
Esta
Vez Ya Nunca Mas Su Ojo Paladeó.
¿A
Donde Ir? Dijiste Asustada Criatura,
¿Quién
Puede A Mi Amado, Mi Amado Despertar?
¿Quién
Ha De Librarlo De Negra Sepultura?
¿De
Este Silencio Abrupto, De La Muerte Su Puñal?
Y
Nadie Que Pudiera, Ni Una Señal De Vida,
Y
Nadie Que Volviera Su Aliento A Ser Verdad,
Nadie
Que Su Pecho, Pecho Que Siempre Latía,
Un
Algo Que Palpitara, Un Algo Nada Más.
Estruendos
De Terror, Abrazos A La Inercia,
Besos
A La Muerte, Su Frío Helabale Los Labios,
Se
Fue, Se Le Fue Yendo De Su Querido La Esencia,
Para
Quedar Cadáver, Cadáver Frío Y Pálido.
No
Supe Mas, Me Contaron Que Todos Lamentaban,
Que
Nadie Lo Entendía, Se Fue Sin Avisar,
El
Cielo Siempre Azul, Mas La Tierra Allí Lloraba,
Pues
La Criatura Arrancada Fue De Su Portal.
¿Y
Que Paso En Los Cielos, Seria La Tristeza?
¿Habría
Alguna Lagrima Cuando El Quiso Llegar?
¿Y
Quien Que Lo Esperara, Habría Allí Belleza?
¿O
Tal Como En La Tierra El Llorar Y El Llorar?
Tu
Dios, Cuando Ella Ardiente Té Pedía Le Devolvieras
A
Su Ser Inanimado El Soplo Del Vivir,
Tu
Cual Tapia Sorda, Silencio Fue La Espera,
Porque,
Mi Dios, Tu También Anhelables Allí.
Nosotros
No Podemos Entender A Tu Ego,
Aquí
Solo Una Lagrima Nos Hace Recordar,
Más
Tu, Tú Eres Dios, De Todos El Primero
Y
Sabes Por Que No Habría Al Fin Un Despertar.
Tu
Amas A Los Suyos Que Solos Se Quedaron,
Desde
Sus Vientres Los Vistes Engendrar,
Tu
Sabes Que No Tendrán A Su Padre Amado,
Y
Que La Orfandad Los Habrá De Abrazar.
Mas
Sabes Que Tu También Eres La Esperanza
Que
Eres El rocio De Todo Amanecer,
Que
Eres El Refugio, Que Eres Mi Confianza,
Cuando
Ya Nada Pueda, Te Tengo Que Creer.
Si
Tú Lo Permitiste A Flor De Su Fortuna,
Cortástele
De Su Tallo, Llevastele Al Jardín,
Tú
Eres El Maestro, El Que Creo Su Cuna,
¿Quién
He De Ser Yo Ahora Para Cuestionarte A Ti?.
Yo
Sé Que Él Lo Anhelaba, Llegar A Tu Presencia,
Las
Calles Esas De Oro, Que Hablan Tal De Ti,
Yo
Sé Que Esta Mejor, Mejor Que Aquí En La Tierra,
Pero
Cuanto Dolor Quedo Sembrado Aquí.
Ayúdanos
Maestro, A Cumplir Tu Voluntad,
Sin
Ponerle Obstáculos A Tus Ciertos Designios,
¿Mirar?
Siempre Adelante, Henchidos De Bondad,
Andando
Si, Andando Por Cualquier De Tus Caminos.
Una Carta De Anita Con Los Detalles De La Muerte De
Luisito.
Marilyn Usuamintiaga
Horta ®8-22-89